Montacargas, transporte indispensable del mundo industrial

Los montacargas son poderosas herramientas que han optimizado y facilitado el desarrollo de diferentes operaciones, principalmente en el sector comercial e industrial. Por ello en Revista de Logística le contamos los tipos de montacargas existentes en el mercado, sus características técnicas y los principales modelos ofertados en El Salvador. montacargas Los montacargas son poderosas herramientas que han optimizado y facilitado el desarrollo de diferentes operaciones, principalmente en el sector comercial e industrial. Por ello en Revista de Logística le contamos los tipos de montacargas existentes en el mercado, sus características técnicas y los principales modelos ofertados en El Salvador.

Los montacargas son vehículos de transporte pesado que se usan principalmente para movilizar, remolcar, empujar, apilar, subir o bajar distintos objetos y elementos de forma vertical. Funcionan con dos pesos que se contraponen entre sí en los lados opuestos del punto de giro. De esta manera, la carga transportada se mantiene balan-ceada y estable por un centro de gravedad que está en todas las direcciones.

Los montacargas son de uso corriente en comercios e industrias. Quienes los manipulan deben estar calificados y contar con conocimientos técnicos y normas de seguridad. La tolerancia del sobrepeso ahorra, además de energía y tiempo, dinero y horas de trabajo.

TIPOS DE MONTACARGAS

Con el paso del tiempo, estos equipos han evolucionado. Hoy existen diferentes clases, cada una intentando acoplarse a las necesidades específicas de los usuarios. Se pueden clasificar según el tipo de motor. Tenemos, por un lado, los montacargas eléctricos y, por el otro, los de combustión interna.

• Eléctricos

Son silenciosos y no contaminan, por lo que resultan convenientes en espacios cerrados. Los alimenta una gran batería, compuesta de ácido y plomo, que puede durar hasta ocho horas.

• De combustión interna

Los motores de estos montacargas funcionan a base de gasolina, GLP (gas licuado de petróleo) o diésel. A diferencia de los eléctricos, estos equipos se reabastecen rápidamente, no deben esperar a que cargue la batería. El montacargas de GLP puede usarse en lugares cerrados por su bajo nivel de contaminación.